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Lluvia de sorpresas, lluvia de amor

Swami siempre nos trae maravillosas sorpresas y bendiciones que no teníamos pensado recibir. Así fue el mes de febrero en el Merendero A Pulmón, del barrio Malvinas de la ciudad de San Salvador de Jujuy, ubicada en una provincia al norte de Argentina, muy cerca de Bolivia.

La primera sorpresa fue cuando los niños del merendero recibieron una grata visita de una devota de Buenos Aires - que estaba de paseo por la ciudad - y su ahijada de 9 años que la acompañaba. Junto con otra devota que asiste al merendero regularmente, se pusieron en marcha para ayudar, madrina e hija colaborando con la preparación y distribución de la merienda y la otra devota dando clases de inglés a un grupo de niñas risueñas y ávidas por aprender.

Una segunda sorpresa llegó cuando de repente, una fuerte lluvia cayó sobre la región, obligando a todos los niños, devotas y mujeres que estaban colaborando, a abandonar la calle donde habían montado los mesones para servir la merienda. Todos, grandes y chicos, ayudaron a levantar los mesones, ollas, jarras con té, arroz con leche, pan y galletas y llevarlos a la humilde casita donde vive Delia, la encargada del merendero.

Fue así que todos se resguardaron bajo techo, a la espera de que la lluvia se alejara para sacar todas las cosas afuera una vez más y poder continuar con la misión. Mientras tanto, las clases de inglés continuaron su curso en la casita, con un espacio muy limitado pero con muchas ganas de continuar y cumplir con éxito la clase del día. Las niñas se morían por aprender todos los colores del arco iris! Luego de un rato,

 

la lluvia seguía azotando el lugar de manera abundante, incluso provocando inundaciones, y como ya era hora de regresar, las tres devotas emprendieron su regreso, previamente con la ayuda de Delia y su hijo, quienes se empaparon bajo la lluvia esperando el colectivo y haciéndolo parar, para que ellas pudieran emprender su regreso a casa. Definitivamente, más que una lluvia de sorpresas, fue una lluvia de amor.

Mientras tanto en la ciudad de Buenos Aires, el grupo de jóvenes continuó con el proyecto de servir el desayuno a gente en situación de calle los domingos. El desayuno incluyó café y jugo con facturas y galletitas. Además del desayuno, los jóvenes distribuyen frutas y sopa instantánea para que la gente pueda comer más tarde y ofrecen ropa y calzado para niños y adultos. Todo lo que el grupo de jóvenes reparte el día domingo proviene de donaciones que se juntan durante la semana. Las donaciones no provienen únicamente del grupo de jóvenes, sino que también de personas que conocen el proyecto y están interesadas en colaborar. En el mes de febrero se incorporó un kit de higiene que contiene una toalla, un jabón y sobrecitos de shampoo y acondicionador. 

El objetivo del proyecto es que las personas en situación de calle tengan los nutrientes necesarios para que puedan aprovechar el día ya que a veces siguen dormidos cuando los jóvenes les ofrecen el desayuno. Sin embargo, ellos los despiertan con un desayuno que les da energía para realizar sus actividades. Aproximadamente 120 personas recibieron el desayuno junto con el kit de higiene y ropa.

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