Con una visión de acoger y apoyar a las madres solteras, los jóvenes de Kazajstán participan todos los meses con fines de brindar asistencia a las familias monoparentales, poniendo especial atención a las madres viudas. Se distribuyen necesidades básicas como alimentos y productos de higiene.
Durante el Año Nuevo de Kazajstán, ‘Nauryz’, los jóvenes voluntarios visitaron a las familias con golosinas, financiadas por ellos mismos. Nauryz simboliza bondad y riqueza, amor y felicidad. Los beneficiarios compartieron sus experiencias con los voluntarios. Una de las mujeres compartió cómo fue salvada por un milagro después de una cirugía reciente y afirmó que siempre tuvo fe en los caminos inescrutables del Todopoderoso. Aunque había renunciado a todas las esperanzas de sobrevivir, y también le había dado su palabra de despedida a su hija mayor para que se ocupara de otros niños, compartió que hubo una fuerza desconocida que vino a socorrerla, enviándole la ayuda oportuna requerida desde todos los rincones. La cirugía fue exitosa, y ella finalmente regresó a sus hijos, lista para servir a los demás por el resto de su vida. Extendió su gratitud a los jóvenes Sai por todo su amor y su apoyo, y afirmó que estas eran también las manos invisibles de Dios en su rescate.
Luego de unas conversaciones tan reconfortantes con los beneficiarios, se distribuyeron paquetes de alimentos y bolsas de golosinas. Con sus corazones llenos y una oración para su Señor Sai, todos los voluntarios inclinaron sus cabezas en agradecimiento por esta oportunidad única de seva.
Distribución de Platos de Comida y Comestibles
Todos los domingos, los voluntarios distribuyen platos de comida en la ciudad de Almaty. Los paquetes de comidas consisten en sándwiches, té, chocolate, galletas y frutas.
Después de las oraciones dominicales en los lugares de culto cercanos, el grupo de necesitados espera y saluda a los jóvenes Sai con palabras como: “¡Ustedes son nuestros salvadores!” ¡Servir a la humanidad es realmente un viaje muy gratificante!