Bay Area Service
Los voluntarios Sai Ashraya han estado sirviendo cenas constantemente. Se están volviendo más amigables y conversando personalmente con las personas en situación de calle. Éstos amigos reconocen a los voluntarios y hablan de una manera más relajada, compartiendo muchas historias personales. Ahora que ven las caras regularmente, están más cómodos a abrirse. Mientras que sirven comida, los voluntarios también se sientan y platican con ellos. En una de las conversaciones corazón a corazón, un amigo en situación de calle de 34 años de edad, estaba compartiendo sobre su pasado.
Él tuvo un buen hogar y estaba trabajando y viviendo con su padre. Su padre tenía una novia quien eventualmente lo dejó por razones desconocidas, se volvió alcohólico y finalmente adicto. Después de muchos años, su padre lo echó de la casa y cómo él le había estado ayudando económicamente, una vez que estuvo fuera de la casa, terminó en las calles. Ha estado en las calles de Oakland por alrededor de un año. No ha estado trabajando ni haciendo nada con un propósito más que beber (cuando está deprimido), tratando en ciertos trabajos de medio tiempo y durmiendo en las calles.
Un día, esta persona estaba tan deprimida y compartió sus pensamientos a un voluntario de Sai Ashraya. Después de la conversación, se sintió muy ligero y creyó que a alguien le importaba. Les estaba diciendo a los voluntarios que recibió una educación y que no necesita el apoyo ni simpatía de nadie, sin embargo, se sintió muy aliviado cuando hablaba con los voluntarios.
Hay otra hermosa experiencia más. Uno de los miembros mayores de la comunidad en situación de calle les dio a los voluntarios una gran cantidad de conocimiento acerca del cuidado terapéutico. Los voluntarios estaban asombrados escuchándolo.
¿Quieren saber lo que esta persona dijo? El señor, con su vestimenta áspera y rasgada les dijo a los voluntarios que la mitad de las personas en esos campamentos parece mentalmente inestable pero que no hay necesidad de que un terapeuta profesional se ocupe de ellos. Todo lo que necesitan es que alguien venga y se siente con ellos y platique con ellos. Aunque ellos aman la deliciosa comida caliente, fresca y saludable que se sirve, son el amor y el afecto que se demuestran hacia ellos así como el cuidado con el que los voluntarios les hablan, los que son los más valuados. Finalmente el anciano mencionó algo que hizo que los voluntarios derramaran lágrimas. Él dijo que es cuidado terapéutico el que estas personas necesitan. Dijo que no son medicinas, ni hospitales grandes ni citas psiquiátricas las que estas personas necesitan. Son los oídos pacientes a sus problemas y compartir el amor desinteresadamente con una intención y sinceridad lo que está sanando a estas personas para su bienestar. Él ha estado viendo conversaciones más maduras en esta comunidad: Ahora las personas hablan sobre conseguir un trabajo, encontrar un hogar, tratar de ayudar a otros amigos en situación de calle y ellos mismos están intentando de formar una comunidad para progresar. Por el momento, estas sólo son pláticas y no sabemos cuándo sucederá todo esto, sin embargo, los voluntarios están siendo testigos de lo que Bhagawan ha estado proclamando por años y años en su morada en este mundo: “El amor sana, el amor cura, el amor es suficiente”.
No es la comida por si sola que los voluntarios han estado dando que está curando a esta gente en situación de calle, sino la forma amorosa en que ellos conversan y toman un interés puro en entender sus necesidades. Quizá son las vibraciones sutiles en la comida, hecha en un ambiente devocional puro, las que están creando un cambio en sus pensamientos. O quizá es el tiempo que se está compartiendo con ellos, el que les está haciendo pensar que ya no deben estar sin un hogar y que pueden ayudar a otras personas a dejar de estar en situación de calle. Sólo Bhagawan conoce cómo está sucediendo la transformación en las mentes de las personas en situación de calle, lentamente, día a día, mientras que comen la comida de los voluntarios y pasan más tiempo con los voluntarios.
Bhagawan también está enviándonos más voluntarios para expandir Su trabajo. La organización (http://www.sahajmarg.org/smww/featured-centre/fremont), quien se enfoca principalmente en meditación y en donde alrededor de 200 personas participan, estaba considerando en realizar actividades de servicio en el Área de la Bahía y a través de un amigo, quien también era un voluntario de Sai Ashraya, conocieron nuestro proyecto de servicio. Ellos participaron en una actividas de servicio con los voluntarios de Sai Ashraya de Oakland, la cual realmente tocó sus corazones. Se encontraban entusiastas por comenzar un proyecto de servicio similar en su locación (Fremont). Los voluntarios de Sai Ashraya fueron a esta locación y junto con ellos, prepararon 180 sándwiches. Estos sándwiches fueron distribuidos en los pequeños hogares de Oakland y en las calles. Este nuevo proyecto de servicio planea ser ejecutado cada semana alternada o una vez al mes.
El equipo Sai Ashrayra le está rezando a Bhagawan para hacerlos más como Jesús y para volverlos puros y distribuir amor, amor y amor. La verdadera esencia de SUS palabras resuena dentro del equipo:
Yo no vine para construir hospitales, escuelas y Ashrams, yo vine por ustedes, para transformarlos, para hacerlos darse cuenta de que son encarnaciones del amor.
Nosotros no somos humanos con una naturaleza divina, somos seres divinos que a veces demuestran una naturaleza divina. Una vez que crucemos nuestras limitaciones mediante el amor y el servicio, todos serán capaces de realizarse y de vivir la vida en un estado de comunicación perpetua con Bhagawan.